Mirador de San Roque

El barrio de Valle de San Roque, situado al noreste del municipio, dista del Casco de Valsequillo unos 5 kilómetros. Existe una importante riqueza de agua minero-medicinal en su subsuelo, que fue explotada mediante una industria de embotellado hasta fechas recientes.
La tradición histórica del barrio está muy unida al Santo Patrón San Roque, al que se le dedica una de las fiestas más importantes del municipio en el mes de agosto. De la ermita que lo guarda se decía, por su ubicación cercana a la linde municipal, que “el cura se vestía en Telde y daba misa en Valsequillo”.
Uno de los mayores atractivos del barrio es, sin duda, el palmeral de gran antigüedad de Phoenix Canariensis que tapiza el Valle. El palmeral del Valle de San Roque, importante concentración de palmeras canarias (Phoenix Canariensis), especie endémica del archipiélago, es un palmeral abierto y seco y, generalmente, se localizan las palmeras en los márgenes de las parcelas agrícolas. Localizado en los ambientes de piso basal, en torno a los 400 metros de altitud, lo podemos ver asociado con otras especies, como vinagreras, acebuches, tarahales, tuneras, inciensos, veroles y pitas. Hasta hace pocos años era frecuente ver pastar a cabras y ovejas en él.
En el otro margen del valle se encuentra un acebuchal, también de gran interés.